6 julio, 2022
Mar Lafuente
Bodegas Francisco Gómez se ha convertido en parada obligada para los que quieran adentrarse en el maravilloso mundo del vino alicantino. Visitar esta bodega del interior de la Costa Blanca, en Villena, es conocer el sueño cumplido de su alma máter, Francisco Gómez; pero también es sentir su misma pasión y entusiasmo. Gracias a las actividades que tienen en marcha, consiguen transmitir la gran riqueza vitivinícola que guarda su finca La Serrata y sus 200 hectáreas de viñedo.
Una visita guiada por sus espectaculares instalaciones, una cata de sus vinos y aceites, conocer de cerca los métodos de la agricultura ecológica y biodinámica, o cómo se elabora un vino desde cero son algunas de las cosas que viven los enoturistas en Bodegas FG. Una completa oferta de actividades diferentes con los nombres: ‘Ruta enológica’, ‘Ruta Queen of Kings’, ‘Trivium’ y ‘Ruta enogastronómica’.
La experiencia ‘Ruta enológica’ comienza con un tour guiado por la capilla de la bodega, los viñedos y jardines, las salas de elaboración, la sala de barricas, la ermita del Fondillón, la sociedad de nichos y el museo del aceite. Para finalizar se realiza una cata de cuatro vinos y dos aceites virgen extra acompañados de una selección de embutidos ibéricos propios. Una auténtica experiencia de 1 hora y media por 20 euros persona que, además, incluye un regalo en forma de copa de vino de Francisco Gómez.
La ‘Ruta Queen of Kings’ es la visita especial para los amantes de los vinos espumosos. En esta se realiza el tour guiado por las instalaciones, pero la diferencia está en la cata, ya que se prueban cuatro de los espumosos de su marca ‘Queen of Kings’. Esta tiene un precio de x euros persona.
‘Trivium’ es la visita más exclusiva de Bodegas Francisco Gómez. Tras el tour guiado por las instalaciones, se procede a catar sus productos más especiales, concretamente: Gold Edition, Black Edition, Serrata Único, Fondillón Quo Vadis 1972 y Aceite Milenario King of Kings. Este cuesta 70 euros por persona.
Y, por último, la bodega alicantina no se olvida de los apasionados de la gastronomía. Por ello, pone en marcha ‘Ruta enogastronómica’ que consiste en un tour guiado por las instalaciones de la bodega y una cata de cuatro vinos, dos aceites virgen extra, una selección de embutidos ibéricos y una comida cóctel maridada con sus vinos.
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