Déjate seducir por el mundo del vino
Déjate seducir por el mundo del vino
2 junio, 2021
César Marquiegui, cocinero del Grupo.
Pedro G. Mocholí
Tanto monta El Nou Manolín como El Piripi, pues ambos tienen a la familia Castelló como impulsores y creadores de ambos establecimientos, y tras ellos está la gran profesionalización que D. Vicente Castelló ha sabido darle a la empresa y todos aquellos que han pasado por ella a lo largo de su larga trayectoria.
Hoy son sus hijos, Silvia y José Juan, los responsables de que todo vaya perfectamente y que nada se desajuste, ni el más mínimo detalle.
El primer establecimiento que abrió fue El Nou Manolín en 1971 de la mano de D. Vicente, y en 1994 se abrió El Piripi manteniendo el concepto barra y restaurante que ya se encontraba en el primero.
De ambos establecimientos destaco el concepto barra, por la informalidad que siempre encuentro y que me seduce. Al igual que a Joël Robuchon, amigo de la familia Castelló y gran cliente de la casa, pues el Atelier que posee en París es un fiel reflejo de la barra de El Nou Manolín.
De ambos locales hay que resaltar la profesionalidad de todos sus camareros y responsables; desde que cruzas el umbral de sus puertas encuentras un ambiente de hospitalidad y amparo como en muy pocos sitios.
Siempre me ha sorprendido esa presteza, por la cual cuando llegas a tu silla de la barra, ya tienes una refrescante cerveza acompañada de unas aceitunas aliñadas, un recibimiento que encuentras en muy pocos espacios.
La importancia de una buena barra es que todo el producto, todo el género esté en exposición, y al igual que en un gran bazar lo puedas ir pidiendo con total normalidad. En las barras, es donde mejor se puede entender ese dicho de “vale más una imagen que mil palabras”.
Las gambas del Nou Manolín.
En efecto, allí ves las gambas rojas de Dénia que rezuman frescura, horas antes aún nadaban en el mar, y ahora las ves cubiertas de hielo esperando la demanda. Al igual que la chacina ibérica que se corta en el momento, brillando su grasa, el entreverado del jamón o del lomo, y el rojo pasión del chorizo.
Que nunca falte un buen tomate de Mutxamel (Alicante), lo podemos aderezar solamente con aceite y toque de sal, realzando esa carnosidad, esa dulzura difícil de encontrar y de igualar. Lo podemos acompañar con los salazones, hueva o mojama de atún de nuestro querido Vicente Leal.
Podemos continuar con una ensaladilla rusa, que podemos coronar con unas anchoas del Cantábrico, y acompañarla con un crujiente pan de cristal.
La barra de El Piripi en una foto de archivo anterior a la pandemia.
Ya hemos tomado la primera caña de cerveza, fría y cremosa, tirada con la habilidad del que ha tirado mucho y hace posible que el gas desaparezca y no nos hinche.
Pasamos al vino, además de poseer una de las mejores bodegas que puedes encontrar en un restaurante español, el servicio que ofrecen a copas es impecable, y para mayor satisfacción de un servidor, el tamaño o capacidad de éstas es de Mágnum (1,50 litros), por lo que la calidad que encuentras es mucho mayor que si las botellas fueran de 0,75cl.
No perdonen las berenjenas rebozadas y acompañadas de salmorejo, o sus calamares a la romana.
Seguimos con unas quisquillas de Santa Pola, cocidas con gran precisión, guardando toda la jugosidad de la cabeza y el toque yodado de sus marfileñas carnes.
Todos estos platos son ideales para compartir, pero además, también encontrarán un gran número de platos de cuchara, ofreciendo un gran sabor, que nos recuerda a una cocina tradicional trabajada con honestidad y conocimiento.
Callos y pata, potaje con almejas y rape, canelones, o la afamada caldereta de raya, muy popular entre los marineros de Santa Pola.
La oferta de arroces sigue manteniendo la claridad y la calidad desde sus inicios, y la propuesta que encontramos es amplia, variada y con una base muy fuerte en el mar. De rape, con almejas, salmonetes, sepias y alcachofas, raya y verduras, gambas y atún, a banda, pieles de bacalao (una gran clásico), y con carne encontramos el de verduras con costillas, y el de conejo con caracoles (otro gran clásico del interior de Alicante).
Los ofrecen caldosos, secos o melosos, encontrando que utilizan varias tipos de arroz dependiendo de los ingredientes y elaboración: Bombita o Carnaroli Envejecido.
Tanto El Nou Manolín como El Piripi nos sorprenden con muchos platos de temporada. En época de alcachofas las elaboran con un velo traslúcido de Jamón Joselito. El toque fundente hace que la verdura se inunde del sabor del tocino, transmitiendo una sutil sensación. Ahora podemos disfrutar del atún fresco de almadraba. Y César Marquiegui nos lo ofrece en el tartar de atún con crema fría de pistacho.
En el apartado de postres no podemos perdonar el Soufflé de turrón, los buñuelos de chocolate o la tarta tatín con helado de turrón.
Hace algunas temporadas que han incorporado una tabla de queso. En ella los amantes del queso pueden disfrutar, pues en la selección encontramos algunos de los mejores quesos españoles; Campo Rus tierno de oveja (Cuenca), Majorero, cabra (Fuerteventura), Pajarete emborrado, cabra (Cádiz), Bosqueño, oveja (Cádiz), Pesebre curado, oveja (Cuenca), Pría, cabra, oveja y vaca (Asturias), Campoveja viejo ahumado, oveja (Valladolid), Cueva de la Magaha, cabra (Granada), Cabrales Arangas, vaca (Asturias).
La proximidad a Alicante es muy corta, por lo que les recomiendo un paseo por su Mercado Central, acercándose a la parada de Vicente Leal, comprando sus ricos y variados salazones.
El Piripi. Avda. Óscar Esplá, 30. Tel.: 965 616 425. Alicante.
Nou Manolín. C/ Villegas, 3. Tel.: 965 200 368. Alicante.
Vicente Leal. Mercado Central de Alicante. Puesto 217. Planta baja. www.salazonesvicenteleal.com Alicante.
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2 comentarios en
Yo diría que la barra que sale es la del Nou Manolín, no la del Piripi.
Ambos dos espectaculares. Yllegando a San Juan playa tienen Pópuli que es del nivel, pero sin el encanto de las barras.
Vivan las barras!! Que vuelvan pronto!!
Durante 7 años tuve la oportunidad de comer o cenar muchos días en los dos restaurantes .Una pasada
en calidad y atención .
Los rincones al fondo de las barras buenas tertulias y negocios se realizan .
La bodega del Nou ,una pasada .
Un acierto de Nodus con el Hotel y Restaurante para visitar y conocer la bodega y la Zona .