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Ciao Checca. Italia en estado puro

20 octubre, 2016

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José Antonio López
Tengo la “biblia” en mis manos y, tras leer la primera página, les aseguro que me ha emocionado. Años de historia y sabiduría culinaria se muestran ante mí con un poderío que pervive a través de los tiempos. Son las enseñanzas de las bisabuelas, abuelas y madres que han guardado, celosamente, sus conocimientos y experiencias nacidas en los ancestrales tiempos de Italia.

Estoy con Andrea y María, las almas del restaurante italiano Ciao Checca. Dos días de conversaciones me han permitido llegar al corazón de una extraordinaria cocina italiana totalmente por descubrir. Leo con avidez cada una de las recetas que Andrea me enseña. Todo está escrito, hasta su más pequeño detalle. Productos, elaboración, posibles cambios de sabores. Todo, todo, desde hace muchos años y además, con el compromiso de que nada puede cambiar a no ser por fuerza mayor, y esas fuerzas no pueden con la historia.

Andrea pertenece a un grupo de amigos apasionados por la cocina tradicional. Les bulle una idea de crear un movimiento de protección a pequeños negocios de hostelería para que no se pierdan y van estudiando poco a poco la forma de hacer realidad sus sueños. Pequeños establecimientos gastronómicos con productos seleccionados al máximo y con una cuidadísima elaboración. Todo basado en las recetas de más allá de las tatarabuelas.

“Mantenemos la esencia de lo siempre bueno”, me comenta Andrea. Y comienza a compartir conmigo toda una historia de productos y platos. Minuciosamente descritos, impecablemente presentados, asombrosamente realizados.

“Nuestra idea es mantener las recetas sanas, para cuerpos sanos. Hemos recopilado lo antiguo y bueno y hemos buscado los productos, su cultivo y elaboración, tal y como se hacía, con la tremenda suerte de que contamos con lo mejor y lo podemos ofrecer con la mayor dignidad».

Andrea ama la cocina y elige Valencia para montar su negocio. Ya está enamorado de la tierra y le faltaba otro amor que lo fijara en ella. María, su apoyo se encarga de eso, y es el principio de la andadura de Ciao Checca.

Es algo más que un restaurante. No es muy grande, pero sí es muy atractivo. Mesas funcionales al igual que las sillas, la vajilla, la cubertería… de andar por casa, pero tiene un toque mágico que lo distingue de otros locales.

A la entrada, un pequeño mostrador donde te enseñan los tipos de almuerzo que te ofrecen. Hay que esperar unos minutos porque, repetimos, nada está hecho. Otra solución es llamar por teléfono y pasar a recoger tu almuerzo o comida, en el tiempo que te indiquen.

La cocina siempre está abierta. Y tanto, como corras mucho, te metes en ella. Está abierta y a la vista de todos. Es una invitación a participar del arte que muestran.

“Necesitaba montar un negocio donde expresar mis inquietudes. Lo hemos conseguido y además hemos juntado a un equipo de personas totalmente entregadas a la idea. Siempre se habla del respeto al producto y de la selección del mismo. Aquí lo llevamos al nivel más alto. No podemos permitirnos que un plato, siendo el mismo, salga un día de una manera y otro de otra. Sí buscamos la perfección, pero ese es nuestro compromiso con el cliente”.

Andrea es una persona humilde que sabe muy bien lo que quiere. Me habla de productos, para mí desconocidos, pero que están en su casa para que todo el mundo los vea. Me habla de la elaboración de la pasta. De sus puntos exactos de cocción. De esas recetas que no conocemos y que hacen grande a la cocina italiana.

Lo bueno, lo nuevo, lo de siempre, con un eterno compromiso.

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“Tenemos un local adecuado a nuestras posibilidades de servicio. 32 personas, ni una más ni una menos. Son las que podemos atender con total garantía con el equipo de que disponemos».

Me cuenta que traen de Italia aquellos productos que no pueden encontrar aquí. Se sienten felices de disponer de la huerta valenciana para garantizarse los productos frescos tan necesarios en este tipo de cocina “que, pese a la abundancia de los platos, te permite trabajar sin problemas de pesadez de estómago. Comer abundantemente, dentro de un orden, pero que no te pese luego».

“Con toda humildad y dando lo mejor de nosotros mismos, me gustaría que todo el mundo conociera esta, nuestra cocina ancestral italiana. Es nuestro reto y es nuestra pasión”.

Mientras hablamos voy fijándome en los platos que van saliendo para las mesas que ya han formalizado su comanda. Cada plato lleva su explicación y se agradece que alguien como Andrea sea el ponente de su obra. Ahora está conmigo y se encarga María de la exposición. Sé que tendré que dejarle pronto porque su otra pasión está en compartir sabiduría con los comensales. Sin cansarlos, por supuesto.

Mozzarella in carrozza. Mozzarella de búfala DOP entre dos lonchas de pan multicereal rebozada.

Torta rustica di pasta sfoglia. Tarta rústica de hojaldre, ricotta, verduras de temporada, huevo, parmigiano Grana Padano.

Insalata di lenticchie di Rascino. Ensalada de lentejas de Rascino, verduras de temporada al vapor, zanahorias en agridulce, mozzarella de búfala DOP, aceite y sal.

Aquí hemos de hacer un alto porque hay un “aplauso” ante este plato, uno de los más apreciados de la carta y de los más recomendados. Una mesa lo está degustando y manifiesta su admiración de forma tan “ruidosa” pero atractiva.

Y seguimos con pasta alla checca (otra creación que levanta pasiones). Ditaloni rayados de trigo, tomate cortado en cubitos, mozzarella de búfala DOP, sal, aceite, albahaca.

Strozzapreti alla carbonara. Pasta corta al huevo, guanciale, huevo, parmesano Grana Padano.

Patty Melt Cheeseburger. Hamburguesa de buey danesa a la plancha con cebollas glaseadas con miel orgánica, queso suizo, pan de trigo integral a la plancha y una guarnición de patatas y calabacín.

Siguen saliendo platos pero me encuentro en la obligación de “liberar” a Andrea y a María. Me quedo con los postres tradicionales, entre los que sobresalen la torta di carote (tarta de zanahoria), el tiramisú y la pannacotta.

Me quedo corto de espacio. Hay que volver. Tengo que informarles que Ciao Checca tiene un menú especial desde 12.50€, y amigos, sus almuerzos, desde 3.40€.

Ciao Checca está en la calle Garrigues, 17. En Valencia. Su teléfono es el 96 115 79 56.

Me ha pillado Andrea. Intento llevarme, con buena fe, la “biblia”, pero eso no se puede hacer. Me invita a volver y a compartir la sabiduría ancestral de la cocina italiana. Acepto. Hay cosas que uno no debe perderse en su vida.

 

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