Déjate seducir por el mundo del vino
Déjate seducir por el mundo del vino
7 noviembre, 2016
Mª Carmen González
Castillo Perelada es una de las marcas referente, tanto de vinos como de cavas, en nuestro país. En funcionamiento desde 1923, su fundador, Miguel Mateu, quiso recuperar la tradición vitivinícola que existía en la zona desde la Edad Media, cuando los monjes que habitaban el monasterio anexo al castillo, hoy sede y emblema de la bodega, elaboraban un vino excelente con el que abastecían a la región.
Y a fe que lo consiguió. Hoy día, casi cien años después, Castillo Perelada se ha convertido en un dinamizador de la zona y los vinos del Empordà y en una bodega emblemática cuyos vinos han estado presente en mesas y eventos de postín, desde la visita del presidente Einsenhower a España, la coronación de Juan Carlos I o los enlaces de Balduino y Fabiola de Bélgica o de los actuales reyes de España.
Pero la bodega no deja de crecer y de experimentar. 5barricas ha hablado con su enólogo y director técnico, Delfí Sanahuja, que nos explica el espíritu de la bodega y de sus retos futuros, como la construcción de una nueva bodega «atractiva, sostenible y moderna», un ‘edificio-paisaje’ propio del siglo XXI a los pies de un castillo de origen medieval.
Otro objetivo, pero del sector en general, nos cuenta, es acercar la cultura del vino a los más jóvenes, y hacerlo de una manera sencilla, moderna y atractiva. Es un trabajo de todos, dice. Bodegas, sumilleres, enólogos, distribuidores, restauradores y denominaciones de origen.
P.- ¿Qué es Castillo Perelada? ¿Cuál es la filosofía de la bodega? ¿Qué caracteriza a sus vinos?
R.- Castillo Perelada es una bodega familiar fundada en 1923 en la Denominación de Origen Empordà, dirigida por Javier Suque, nieto del fundador Miguel Mateu. Nuestro objetivo es ser una bodega referente, de vinos de muy alta calidad y personalidad, tanto a nivel nacional como internacional, con gran vocación de experimentación tanto en viticultura como en bodega. Buscamos vinos de gran personalidad que se identifiquen con el paisaje y el territorio, marcando claramente el viñedo del que proceden los vinos y de gran complejidad, en los vinos que proceden de distintos terrenos.
P.- ¿Qué características aporta l’Empordà a sus vinos y qué papel ha jugado Castillo Perelada en el resurgimiento de la zona?
R.- El Empordà le aporta mucho carácter, personalidad y complejidad, debido a los distintos tipos de terreno (arenas, arcillas y pizarras), y sobre todo al factor de la tramontana (viento del norte), que estresa las cepas y hace que no tengan mucho vigor y, por consiguiente, sean uvas más sueltas, homogéneas y de poca producción. La media, de las 150 hectáreas de viñedo propio, no llega a los 5.000 Kg/ha.
En cuanto al papel en el resurgimiento de la zona, he de decir que Castillo Perelada ha sido una de las bodegas líderes, por su historia y su vocación de calidad en todos sus vinos.
P.- ¿Cómo está funcionando la vendimia este año?
R.- Se prevé una cosecha corta, de aproximadamente un 30% menos que la cosecha de 2015, un poco desigual dependiendo del viñedo y la variedad. Va a ser un buen reto trabajar con una cosecha complicada, pero creo que al final saldrán vinos de buena calidad si sabemos hacer bien las cosas.
P.- ¿Cuáles son los secretos de un buen vino? ¿Cómo se consigue?
R.- Principalmente hay que cuidar, trabajar, conocer y experimentar en el viñedo (la base de un buen vino es la uva), y después sacar el máximo de cada viñedo para expresar en el vino la máxima calidad y personalidad de cada vino. Y todo ello se consigue con trabajo, experiencia y sensibilidad.
P.- ¿A qué público va dirigido Castillo Perelada? ¿Es el vino un producto para ‘gente mayor’ y de cierto poder adquisitivo? ¿Qué hay que hacer para llegar al público joven?
R.- Castillo Perelada va dirigido a todos los públicos. Elaboramos vinos más básicos y también vinos con más intensidad, complejidad y personalidad.
El vino no creo que sea un producto para gente de cierta edad y poder adquisitivo. Hay muy buenos vinos de todos los precios. En España tenemos vinos de precios muy asequibles y muy buenos. Lo que hay que hacer es acercar el vino a los más jóvenes, de una manera más sencilla, moderna y atractiva. Es un trabajo de todos: bodegas, sumilleres, enólogos, distribuidores, restauradores, denominaciones de origen…, todo el mundo del vino en general.
P.- A pesar de la dificultad, dado el gran número de vinos y cavas que elaboran, dígame de cuál de ellos se siente más satisfecho. ¿Por qué?
R.- De distintos vinos, pero ‘5 Finques’ creo que es un vino asequible que reúne muy buena relación precio-placer; ‘Finca Malaveïna’ es un vino con una buena trayectoria desde la primera cosecha en 1999; ‘Ex.Ex’, es un vino de distinta experimentación cada año y ‘Finca Garbet’ es el que conlleva más exigencia, ya que además de la calidad, hay que expresar la personalidad única que tiene la Finca.
P.- Castillo Perelada ha estado presente en las mesas de reyes, artistas o presidentes americanos. ¿Qué tienen estos vinos para estar presentes en mesas tan importantes? ¿Qué papel tiene Castillo Perelada en la ‘historia vitivinícola española’?
R.- ¿Su papel? Ser una de las bodegas españolas que aporten vinos con personalidad propia, ser un referente en la zona y aportar lo máximo posible para que se conozcan aún más los vinos españoles en exportación.
P.- Además de estos vinos de ‘alta expresión’, el grupo Perelada tiene otros más asequibles, como ‘Blanc Pescador’ y ‘Cresta Rosa’. ¿Qué acogida tienen?
R.- El Blanc Pescador se creó en 1967 y Cresta Rosa en 1974 y siguen siendo un referente en los vinos de aguja. Don vinos con una marca muy consolidada y hay que seguir trabajando para atraer nuevos consumidores.
P.- Con un castillo como símbolo de la bodega, hotel y otras instalaciones, ¿qué importancia le dan al enoturismo?
R.- Le damos muchísima importancia a este tipo de turismo. Cada año aumentamos las visitas en la bodega y cada visitante en la bodega pretendemos que sea un embajador de la marca.
Tenemos una oferta variada de visitas y catas, además de otras actividades realizadas directamente en los viñedos, como un desayuno en Finca Malaveïna y otra en Finca Garbet donde degustar, en un entorno mágico frente al mar, los dos vinos iconos de este viñedo, y conocer así nuestro trabajo desde perspectivas distintas.
P.- ¿Qué proyectos de futuro tiene Castillo Perelada?
R.- Estamos diseñando una bodega nueva en Peralada que esperamos sea un referente a nivel nacional e internacional. Se está trabajando para que sea funcional, atractiva para el visitante, sostenible y moderna.
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