11 enero, 2016
2015 no fue un año cualquiera en el calendario de Bodegas Solar de Urbezo de la DOP Cariñena. Se cumplieron 20 años de su fundación, y para celebrarlo, han estado tiempo trabajando en un proyecto en el cual han puesto todo el empeño e ilusión: la primera línea de vinos con certificación ecológica, que acaba de vio la luz apenas unas semanas.
Un blanco, el Urbezo Chardonnay 2015, que se vendimió de noche el pasado 26 de agosto, ha sido el primero en hacer su aparición. Santiago Gracias Ysiegas, propietario y fundador de la bodega, afirmaba en la vendimia que “conservando la esencia de Solar de Urbezo queremos sacar al mercado unos vinos ilusionantes, que prometen elegancia, frescura y suavidad”.
Así pues, el resultado ha sido un vino joven, inundado de aromas florares y frutales, que convierte su juventud en una maravillosa cualidad, y donde puede verse reflejado la casta de las cepas y los sabores de la uva chardonnay aragonesa.
El resto de los vinos jóvenes: Urbezo Merlot Rosado, el varietal Urbezo Garnacha y el tinto de maceración carbónica, Viña Urbezo, irán saliendo al mercado a principios de año hasta completar esta primera línea ecológica .
Las uvas proceden de la explotación vitícola familiar del Paraje Urbezo, situado en el término municipal de Cariñena, a los pies de la sierra de Algairén, frente al Moncayo, donde se cultivan viñas desde el año 1800. Estudios de la Universidad de Zaragoza avalan que el vínculo entre los vinos y el medio geográfico y climático de dicha finca, hacen que estos vinos presenten características singulares y específicas.
En 2015 Solar de Urbezo era auditada y certificada por el C.A.A.E. (Comité Aragonés de Agricultura Ecológica) para que la cosecha de este año pudiera certificarse como ecológica y poder sacar así esta primera línea . Para que un vino pueda considerarse ecológico ha de cumplir los requisitos legales de agricultura ecológica, que son regulados a nivel comunitario. Por un lado es necesario seguir prácticas verdes en los distintos procesos de producción, desde el cultivo hasta la bodega, y por otra, se requiere el correspondiente certificado oficial ecológico en las etiquetas, ya que ese vino habrá tenido que ser certificado por cada Comunidad Autónoma de haber pasado los controles de calidad pertinentes que fija la Unión Europea para este tipo de vinos.
En los últimos años, los vinos ecológicos están siendo cada vez más reconocidos y valorados dentro y fuera de nuestras fronteras, y su consumo es cada vez más floreciente. Por eso, en la decisión de iniciar estas prácticas en Solar de Urbezo han influido tanto las nuevas orientaciones del mercado, así como apostar por lograr la mejor calidad, con una producción más sostenible y respetuosa con el medio ambiente, dándole además un valor añadido al producto.
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