7 August, 2015
Vicent Bosch / Jaime Nicolau
Realizamos nuestra segunda parada en Emina Ribera del Duero de la serie #viajeros5b. Si en la primera les detallábamos el proyecto enoturístico con el Museo y el Hotel Emina como centros neurálgicos, en esta ocasión nos centraremos en la bodega que, como ya les contamos en esa primera entrega, tiene también una importante faceta enoturística.
Nos acompaña Remi Sanz, director de comunicación del Grupo Matarromera, que comienza desgranándonos el grupo, compuesto por un total de ocho bodegas. “En Ribera del Duero hay tres: Matarromera, Emina y Rento, muy pequeña, en la que elaboramos un vino de autor del mismo nombre. En Rueda, Emina, que elaboramos los blancos. En Toro Cyan, en Cigales, Valdelosfrailes, en Rioja, Bodega Carlos Moro (presidente y fundador del grupo) y Oxto en la denominación Castilla y León”, detalla el dircom de Matarromera.
“Todas ellas son visitables. Y en todas se hace enoturismo. Desde la simple bodega y cata, a rutas turísticas por bodegas, viajes en globo, en helicóptero desde Madrid, hotel y restaurante. Tenemos todos los servicios”, vuelve a recalcar Sanz.
Nos centraremos en Emina Ribera del Duero en la que, como en todas las firmas del grupo, el viñedo marca la piedra angular. “Para nosotros la investigación es notable. Un 30% de la facturación se reinserta en esto. Somos el primer propietario de Castilla León con más de 530 hectáreas de viñedo, que también explotamos enoturísticamente y la gente lo disfruta. Que vean de verdad dónde se hace casi todo el trabajo que se realiza para elaborar un vino. Abogamos por desmitificar el mundo del vino y hacerlo alcanzable. Somos conscientes de que al 99% de la gente que viene le gusta el vino, pero no es un experto”, argumenta.
La gama
“En cada bodega tenemos un vino más económico y de ahí, crianzas, reservas e incluso vinos de Pago. Desde 3 euros hasta 190 euros”, resume al hablar de los productos del grupo. Y es que sólo en Emina Ribera del Duero podemos encontrar:
Emina Rosado, un vino que procede de uvas de la variedad tempranillo de sus propios viñedos en Cubillas de Santa Marta. La fermentación ha sido a temperatura controlada, emergiendo la intensidad de la fruta. A la vista es de color picota medio, limpio y brillante, con irisaciones amoratadas. Presenta una intensidad aromática alta, con una amplia gama de aromas frutales de fresas, melocotón, piña y moras negras, con toques florales de hinojo. Muy expresivo y con la franqueza que define a la tempranillo. En boca es muy equilibrado, con una acidez que da frescura en armonía con cuerpo voluminoso y glicérico. Retronasal intensa que hace resurgir de nuevo los aromas de frutas maduras, con agradable sensación de volumen y final largo.
Emina Pasión. Elaborado con uvas 100% tempranillo procedentes de los mejores viñedos de la Ribera. Pasión es la guinda del pastel vitivinícola que Matarromera elabora en su bodega Emina de Valbuena de Duero. En fase visual capa alta dominando tonos cardenal oscuro y violáceos. En fase olfativa profundo y franco, dominado aromas primarios varietales de fruta madura de la gama de la fresa, café y torrefactos de su crianza en barrica. En fase gustativa es rico, estructurado y redondo, con un buen esqueleto de taninos dulces, con agradable sensación de fruta madura y final largo y agradable.
Emina Crianza. Elaborado con uvas de la variedad tempranillo del Coto de San Bernardo. Tras una cuidada selección y elaboración ha permanecido en barricas de roble americano y francés. Color cereza intenso con reflejos púrpura. Limpio y brillante. En fase nasal es muy complejo, en excelente armonía con sus aromas: frutas maduras, café. En boca es poderoso, redondo y bien estructurado. Dulces taninos pulidos con madera limpia. Suave y persistente final.
Emina Reserva. Selección de uvas tempranillo de la finca de Valdebaniego, en Valbuena de Duero, que aporta a este vino la tipicidad del terruño, una cuidada elaboración y una estancia de 16 meses en barricas de roble francés. Capa muy alta dominando tonos amoratados y cardenales muy oscuros. Muy intenso y franco, dominando terciarios especiados (clavo, torrefactos y frutos secos) con fondo de primarios varietales de fruta compotada. Amplio con un notable esqueleto de taninos dulces, con buena sensación de aromas de crianza con fondos frutales, final largo y persistente.
Emina Atio. Procede de la finca del Horno, en Valbuena de Duero, con viñedos de tinto fino arraigados sobre un terreno especialmente calizo a 800 metros de altitud y gran insolación, que conforman un terruño de singulares características, presentes en el vino. Capa muy alta dominada por tonos amoratados a cardenal muy oscuro. Limpio y brillante. Nariz muy franca con excelente complejidad. La potencia y longevidad del vino se percibe al aparecer potentes sensaciones primarias de frutas negras muy maduras de la gama de la mora y la grosella, a pesar de su prolongada estancia en barrica nueva. Los aromas primarios están perfectamente ensamblados con terciarios especiados, tostados, cacao, tabaco y cedro. Esqueleto voluminoso, con un paso de nobles taninos dulces, destacando aromas terciarios torrefactos y de maderas nobles y ligera sensación frutal, con final largo, potente en intenso.
Emina Oxto. Es un vino fortificado que ha sido elaborado con uva 100% Tempranillo y envejecido en barrica de roble durante 3 años. Después se embotella, estando ya listo para el consumo, lo que le permite seguir conservando los aromas afrutados y su característico color oscuro. Capa media-alta, picota oscuro con ribetes amoratados. Excelente equilibrio entre los aromas primarios del vino con los terciarios de su paso por barrica de roble americano. Es sorprendente la presencia de la fruta madura que destaca las subsiguientes fases de fermentación y crianza del vino. Amplio, intenso y rico. Buen ensamblaje entre unos taninos redondos y muy maduros, con unas equilibradas sensaciones dulces del contenido en azúcar al tratarse de un vino dulce fortificado. Muy complejo en boca donde se aprecian sensaciones frutales de uvas y ciruelas pasas con toques de licorosos, madera y agradable aguardiente añejo. Si los anteriores eran DO Ribera del Duero, Oxto es un Vino de la Tierra de Castilla y León.
Como ven una gama completa que hace que en Emina Ribera se elaboren “1,2 millones de botellas, el 65% para el mercado nacional y el 35 exportación. Estamos en 70 países, contando con delegación propia en EEUU, China y México, el resto con importadores y distribuidores”, explica Remi Sanz.
Respecto al futuro, Sanz fija la mirada en el proyecto recientemente iniciado por el Grupo Matarromera en Rioja con Bodega Carlos Moro. “Queremos jugar la Champions. Aprender de los mejores y trabajar con nuestra pasión y por eso hemos comprado unos activos para hacer el mejor vino posible. En Rioja hay 800 bodegas y queremos pelear con los más grandes, sabiendo que empezamos desde cero. Estamos en San Vicente de Sonsierra, que dicen que es la cima de la calidad. Queremos elaborar este año y, por supuesto, a nivel turístico también estará abierta al público”, concluye.
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