Viento sobre la Piel 2019 logra su primera medalla de oro

Pedro R. Arias
Cooperativa de Viver continúa acumulando premios, el último a una de sus joyas, Viento sobre la Piel. El concurso internacional Catavinum World Wine and Spirits Competition (CWWSC) ha premiado con una medalla de oro a este tinto monovarietal perteneciente a la Indicación Geográfica Protegida de Castelló. Un vino de parcela muy frutado con una ligera maduración en barrica, cuya añada 2019 está resultando espectacular.

Este reconocimiento se suma al de su anterior añada 2017: una medalla de oro en los Premios Mezquita 2020, una plata en el International Wine Awards 2020 y otra plata en el prestigioso concurso Mundus Vini 2019. «Para nosotros, como elaboradores de vino que estamos empezando desde 2016, es un reconocimiento importante, porque nos dice que vamos por el buen camino y que la gente está empezando a valorar y a conocer nuestros vinos. De hecho, un poco también combinado con la medalla, es por lo que ya empezamos a tener puntos de venta en València ciudad», afirma Cati Corell, directora del área de producto y agroturismo.

Asimismo, Corell considera que el motivo por el que el jurado les ha concedido esta medalla de oro pueda deberse al encontrarse con un monovarietal de syrah que conserva mucha fruta, pero que tiene esos toques de complejidad y de mineralidad que le dan un toque diferente y fácil de beber. «Viento sobre la Piel no es nuestro vino de máximo nivel, pero sí que aspiramos que sea un vino que nos represente a nivel de consumidor joven que busca ahora mismo vinos más frescos, con más fruta y con un paso por barrica muy breve».

Viento sobre la Piel 2019 es un tinto monovarietal con tonos rojos y violáceos que denotan su juventud. En nariz destaca la fruta roja, por encima de unos ligeros toques de vainilla y balsámicos, que pasa ese ligero paso por barrica de cuatro meses. Y en boca es cremoso y untuoso, los aromas retronasales son idénticos a los encontrados en la nariz. Un tinto largo y sedoso idóneo para maridar platos de pasta, arroz o carne.

El syrah del que nace este vino se ha tomado prestado de los viñedos que posee la cooperativa en dos municipios de la comarca de l’Alt Palància: el Caudiel y Jérica. «Esta añada el syrah ha salido espectacular. Hemos extraído un poco menos, obteniendo una menor intensidad de color, pero conservando toda la potencia aromática», señala Corell. El resultado ha sido una producción de 3500 botellas de un vino más ligero a su anterior añada, apto tanto para una comida como para tomar una copa a solas con aperitivos junto a amigos.

La Cooperativa de Viver es un proyecto fundado en 1990 para agrupar a las pequeñas almazaras artesanales existentes en la población castellonenses y así poder poner en marcha una almazara moderna para elaborar aceites de oliva virgen extra de máxima calidad. Desde 2015, la cooperativa comenzó a recuperar la tradición vitivinícola del municipio en parcelas repartidas entre Viver, Jérica, Caudiel y Segorbe. Vinos criados en viñedos que van desde los 450 a los 700 metros de altitud de suelo arcilloso-arenoso o carcilloso-calizo y cuyo clima mediterráneo les otorga carácter y estructura sin perder su toque frutal y fresco.

Tanto el vino como el resto de espectaculares productos de la Cooperativa pueden ser adquiridos a través de su tienda online. Asimismo, Viento sobre la Piel también se encuentra incluido en varias cartas de restaurantes de Viver, la comarca de l’Alt Palància (Gastroadictos, la Farola, Martín el Humano…), Dénia (Restaurante Pont Sec de Pep Romany) e incluso València (Restaurante Joaquín Schmidt). ¿A qué esperas a probarlo?

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