4 marzo, 2020
En su 15 aniversario, la Ruta del Vino de Rioja Alavesa continúa siendo una opción fabulosa para visitar en familia. El Día del Padre se convierte en la excusa perfecta para dejarse enamorar por este territorio. Con planes para los amantes del vino, la cultura y la naturaleza, ofrece infinidad de planes aptos para los visitantes de todas las edades. Ya sea descubriendo los vinos sobre los que gira la comarca, conociendo el proceso de su creación o recorriendo las villas que invaden el terreno.
Con la llegada de la primavera, los mares de viñedos que se extienden en todos los sentidos empiezan a volver a la vida. Las primeras hojas dan paso a un mar verde que no es sino el primer síntoma de la próxima vendimia. Ahora toca volver a mimar las cepas para que siga ofreciendo sus magníficos frutos, que terminarán siendo el codiciado vino que riega la cultura de la zona. Esta no es más que una simple excusa para dejarse caer por una tierra repleta de planes para mayores y niños en una escapada en familia deliciosa.
La Ruta del Vino de Rioja Alavesa lleva ya 15 años mejorando la experiencia del visitante, y en estos años ha conseguido aunar la pasión por el vino y su cultura para los que quieren recorrer su territorio. Descubrir (o redescubrir) la Ruta del Vino de Rioja Alavesa en familia es una experiencia impresionante para los sentidos. No solo los visitantes se sentirán como en casa, sino que también disfrutarán como nunca gracias a sus múltiples opciones culturales, en la naturaleza y con las actividades de ocio pensadas para todos los gustos.
Desde 2017, diferentes socios de la Ruta forman parte del club de producto Turismo Familiar creado por la agencia vasca de turismo Basquetour bajo unos requisitos de calidad que garantizan el disfrute de toda la familia. Un club que aglutina diferentes experiencias en las que los protagonistas son los más pequeños acompañados de mayores inquietos por descubrir una de las comarcas enoturísticas más famosas.
Es un proyecto colectivo, al que se han unido más de 140 establecimientos, como bodegas de distintas tipologías, museos, alojamientos, restaurantes, empresas de actividades y enotecas, con el objetivo de mejorar la experiencia del visitante.
Otro de los planes más atractivos son las visitas guiadas a bodegas. La ruta está plagada de estos edificios que emergen de entre los mares de viñedos. Algunas son centenarias, mientras que otras son completamente vanguardistas. Simplemente disfrutar de la estampa que conforman sobre el terreno ya supone una experiencia en sí misma.
Otra opción es ir recorriendo la ruta a través de sus villas, dejándose seducir por su atractivo y encanto. En total, 19 son los municipios de la comarca que se encuentran en la ruta, todos ellos llenos de historia en cada palmo de sus calles. Recorrer cualquiera de ellos a pie, dejándose seducir por su encanto, es un plan fantástico apto para toda la familia. El paraje sobre el que se erigen las villas es impresionante, ideal tanto para contemplar el amanecer que enamora o el atardecer que seduce sobre los viñedos de Rioja Alavesa. Sin duda, una experiencia única que merece ser compartida con los que más quieres: con la familia.
Puedes consultar toda la información sobre las actividades en www.rutadelvinoderiojaalavesa.com/es/agenda.
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