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Rafael Cambra: «La calidad debe ser nuestro trampolín»

4 abril, 2018

Jaime Nicolau

Es uno de los enólogos más destacados del panorama vinícola nacional. Tenemos el privilegio de que desarrolle su pasión en el triángulo mágico que conforman la Font de la Figuera, Moixent y Fontanars. Rafa Cambra vive con pasión un sector al que ha dedicado su vida. Nos hace un hueco para hablar de los vinos mediterráneos, ahora que se acerca La Mostra de Vins de Proava, en la que, como cada año, asistirán las bodegas que conforman Terres dels Alforins.

5barricas.- Echando la vista atrás, ¿cómo ha cambiado el sector del vino valenciano en los últimos 25 años?

Rafa Cambra.– Pienso que ha sido un cambio importante a calidad y debería servirnos de trampolín para seguir mejorando. Entiendo el cambio en sentido global: mayor sensibilidad en el viñedo y nuestras variedades autóctonas, mejora en la imagen de los vinos y un apoyo por parte de sumillers y comunicadores.

5b.- ¿Cómo fueron tus inicios?

R. C.- En 2001 hicimos nuestra primera elaboración con monastrell (2.400 botellas Rafael Cambra Uno), gracias al apoyo de Pablo Calatayud en su bodega. En 2002-2007 elaboramos en un antiguo garaje de frutas en Ontinyent, dónde fuimos creciendo hasta las 50.000 botellas. En 2008 pasamos a Fontanars dels Alforins a una bodega más grande, donde empezamos a plantar Casa Boscà y elaborar el Bon Homme y Soplo.

5b.- ¿Y ahora la zona donde se ubica la bodega es una de las más valoradas por la crítica?

R. C.- «El éxito es fácil de obtener… lo difícil es merecerlo” A. Camus. Somos muy jóvenes y toca seguir luchando para encontrar nuestro camino.

5b.- ¿Dónde crees que está el secreto de este reconocimiento?

R. C.- En que son tierras de interior, de altura y secano estricto, idóneas para un cultivo ecológico, con pocas intervenciones y rendimientos bajos. También en el patrimonio de variedades locales (monastrell, mandó, forcalla, verdil, arco…) que heredamos y que nos está permitiendo buscar nuestro camino. También el factor humano, en Fontanars lo iniciaron Daniel Belda y Manuel Olaechea en Los Pinos.

5b.- ¿Por qué tu empeño en trabajar con variedades casi en desuso y cuáles de ellas destacarías?

R. C.- Porque tienen una adaptación a nuestra zona de muchos años. Han resistido periodos de sequía, soportan bien las lluvias torrenciales de septiembre; se adaptan perfectamente al sistema tradicional del vaso y son de ciclo largo, capaces de embeberse mejor de las características de la añada.

5b.- ¿Crees que entre todos hemos complicado un poco el mundo del vino al consumidor final?

R. C.- Creo que hay que ser muy elástico, y el producir un vino joven o de crianza corta y presentación atrevida, desenfada puede convivir perfectamente con aquellos vinos que vienen de parajes de mucha personalidad vitícola. Un consumidor curioso por un vino, encuentra en internet rápidamente características sobre un vino o la posibilidad de conocer la bodega.

5b.- ¿Vive Terres dels Alforins su mejor momento?

R. C.- Estamos en un buen momento, pero aunque el cultivo de la vid se remonta a la cultura íbera, somos jóvenes en el vino embotellado.

5b.- ¿Por qué el enoturismo no acaba de arrancar en la Comunidad Valenciana?

R. C.- Al ser una zona con mucho turismo, estamos muy pendientes de las cifras de turistas, pernoctaciones… quizás deberíamos ser menos ambiciosos y avanzar junto a la restauración local en atraer a amantes de un producto honesto y de calidad, que aprecie el descorchar una botella. Por otra parte, las dificultades que hay en la Comunidad Valenciana para la creación de bodegas en entornos rurales son inmensas. ¿cómo vamos a incrementar el enoturismo llevando a los turistas a polígonos industriales? En la Rioja, la implantación de bodegas en zonas rurales es una prioridad indiscutible, en Valencia, no … somos “un poco comparsa”.

5b.- ¿Qué vino de los elaborados hasta ahora es el que más satisfecho te ha dejado?

R. C.- CasaBosca 2016. Monastrell, Arco, Forcalla, Bonicaire y Rojal plantadas en suelos de terrazas y criado en hormigón puro.

5b.- ¿Qué vino sueñas todavía con hacer?

R. C.- Más que en un vino concreto, en el conjunto. Cada vendimia es como un renacer y a pesar de las dificultades que van apareciendo cada año, sueñas en que será un gran vino.

5b.- ¿Qué te gustaría que encontrara un consumidor en una copa de ese vino?

R. C.- La fragancia de una rosa… difícil de explicar pero que a todos nos emociona.

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