No todo el mundo sabe y consigue presentar, en tapas, los platos más selectos de nuestra gastronomía. No estamos hablando de pinchos sino de algo distinto que hay que conocer y disfrutar.
1 diciembre, 2014
José A. López
No ha sido por casualidad. Kike y su equipo llevan trabajando mucho tiempo invirtiendo gran cantidad de horas, incluso de sus días libres, en pos de una meta que les llevase a conseguir algo totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados. A fe cierta que lo han conseguido.
Pese a su juventud, lleva muchos años de oficio.
Kike nació en el mundo de la hostelería. Su padre, Manuel Espinar junto a su inseparable mujer Dolores trabajaron muy duro hasta conseguir lo que, ahora, sus hijos han de engrandecer siguiendo las enseñanzas de sus mayores. Masía de las Estrellas, Arrocería Hispania en Beniparrell y Tapería Hispania en Valencia.
Kike ha conseguido “reducir” si se me permite la expresión, los platos más tradicionales e incluso los de más vanguardia, en raciones más pequeñas. Tapas, ni más ni menos.
Pero no nos llevemos a error. Vemos y disfrutamos del producto. Los platos son abundantes y consistentes. Como deben ser. No son pinchos.
Desde las ocho de la mañana ya nos sorprenden con sus desayunos.
Unas novedosas propuestas que nos llenan de energía. La misma que transmiten el equipo de sala, que te hace sentirte como en casa desde el primer momento.
El almuerzo para disfrutarlo.
El bocadillo del día ¡sorpresa continua! acompañado por unos pimientos en aceite que quitan el sentido o unas aceitunas rellenas de ajo que son como para quitarse el sombrero. Tranquilos el ajo no repite. Por cierto, no se cómo lo consigue Kike.
Y es que una de las pasiones de este hombre es la selección de los productos y la búsqueda de nuevos proveedores que tengan algo sorprendente, siempre y cuando esté a la altura de las exigencias de calidad que él marca.
Menú, sí amigos, un menú de 12 € con una presentación de 6 platos donde no faltan las ensaladas, las sopas (frías o calientes según la época del año) dos tipos de arroces, y cómo no, pescados y carnes.
Si quiere entrar en el mundo de la tapa con mayúsculas podemos recomendarles, entre otras las especialidades para degustar solos o compartir, como son los boquerones doble cero sobre cama de mojama con piparras y berenjenas de Almagro. El calamar de playa fresco con cebolla caramelizada y habitas, las croquetas caseras, los huevos de codorniz con migas del pastor, senderillas e ibéricos o los huevos trufados con ibéricos…
Palabras aún mayores, por si no tenemos bastante, es la creación que les dío el Segundo Premio de Tapas en 2014. Ni más ni menos que una tapa compuesta por una base de chipirón con calamar relleno de ajo arriero y con fideos chinos.
Si tienen ocasión pídanle a Kike que les prepare un plato tan sencillo como maravilloso. Simplemente un tomate valenciano con ventresca o filetes de sardina en aceite. Con aceitunas.
Y no se olviden de su última creación, y la que guarda con más celo en cuanto a su elaboración, unas verduras en tempura que son dignas de dar la vuelta al ruedo en las mejores plazas.
Más de un mes de trabajo le ha costado a Kike y a su equipo dar con el punto exacto que ellos buscaban.
Me gustaría que conocieran el local. Tapería Hispanía en la calle Hernán Cortés, 20 en Valencia. Su teléfono 96 310 69 98.
No es muy grande pero es muy acogedor.
Blanco puro y liiiiimpio hasta decir basta. Cómodo, muy sencillo.
Lugar que crea hogar y complementos que demuestran un exquisito gusto y una obsesión, no enfermiza, por cuidar de los pequeños detalles.
No hay ruidos y la música crea un acompañamiento que relaja.
Hay que venir con las menos prisas posibles.
Su bodega, muy amplia. Vinos de donde y como quieras. Selección de cervezas. En la sobremesa, por la tarde, o a última hora de la noche, los combinados que más te gustan.
La oferta que Kike ha conseguido en su local cubre todas las horas y satisface todos los gustos.
Hay dos cosas que les quiero contar. La primera es que van a disfrutar de la hospitalidad de un gran equipo de profesionales. La segunda es que les quedará un secreto por descubrir: Las patatas bravas de Ernesto. Toda una historia que habrá que contar.
Será en otro momento.
Será en Tapería Hispania.
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