23 septiembre, 2016
Mª Carmen González
María Larrea es la directora técnica de la Compañía Vinícola del Norte de España (Cvne). Desde hace un tiempo es la enóloga jefa de diferentes bodegas del grupo, una labor que realiza con gran entusiasmo y rodeada de un gran equipo, y que afronta con el objetivo de adaptar los vinos de una bodega centenaria a los nuevos tiempos sin perder la esencia que los caracteriza y con el objetivo de la sostenibilidad en el horizonte. «El reto –afirma– es conseguir que nuestros vinos sigan siendo líderes como han sido durante estos 137 años».
Para Larrea es un honor estar al frente de una bodega centenaria, en la que se aúna tradición e innovación. Disfruta (y mucho) con su trabajo/hobby. Así, confiesa que cuando está en la bodega crea diferentes personajes en su mente e imagina qué vino le gusta a cada uno de ellos, para tratar de elaborarlos después. Piensa en vino.
El equipo de enología de Cvne es mayoritariamente femenino. Y es que la mujer está adquiriendo cada día «más protagonismo» en el mundo del vino, «tanto como enólogas como consumidoras de todo tipo de vino». «Se nota en las nuevas generaciones; los estudiantes que vienen a hacer las prácticas a la bodega son chicas. No hay un motivo especial», dice Larrea, quien resalta que el de la elaboración de vino «no es un trabajo que se haga mejor por ser hombre o mujer». «Y por eso mismo era injusto que la mujer no tuviese su hueco ya en las bodegas». Sin embargo, afirma Larrea, «esta perspectiva ha cambiado, definitivamente, y Cvne es el mejor ejemplo de ello».
«La mujer ha desarrollado siempre una importante labor en el sector vitivinícola y no era de extrañar que esa pasión se viera reflejada en la elaboración de los vinos. Aún hoy los grandes gurús del vino suelen ser hombres, pero cada vez las mujeres están adquiriendo mayor protagonismo en nuestro país», comenta. «Creo que el cambio ha sido realmente en la sociedad más que en el mundo del vino. Ya nos hemos acostumbrado a que las profesiones no sean cuestión de sexo, y la de enóloga no iba a ser menos», añade al respecto.
María Larrea concede una entrevista a 5barricas
P.- Háblenos de Cvne. ¿Cuál es su esencia?
R.- En Cvne creemos en la tradición por encima de todo y apostamos por la innovación como leitmotiv. La armonía entre estos dos valores nos ha permitido consolidarnos como una de las bodegas centenarias de referencia en el mundo del vino en España, así como llegar a más de 75 países de todo el mundo. Estamos orgullosos de nuestros orígenes, y uno de nuestros objetivos ha sido mantener vivas esas raíces y esas costumbres con las que nuestros antepasados crearon estas bodegas. Pero somos conscientes de que hay que adaptarse a los nuevos tiempos, precisamente para mejorar nuestro producto y crear otros nuevos.
Así, podemos decir que CVNE es hoy el resultado de una apuesta clara por la tecnología y la investigación de la vinificación, así como de la conservación de las antiguas tradiciones bodegueras y la calidad.
P.- ¿Cómo son sus vinos?
R.- El resultado de esta labor son vinos intensos, atractivos, finos y elegantes, pero lo más importante es que se adaptan a cada circunstancia y a cada persona. Tenemos vinos para ocasiones muy especiales, y vinos para el día a día, para quien quiere cuidar la línea y para quien quiere celebrar algo. Son vinos con mucha calidad al mismo tiempo que accesibles. Y además los tenemos de todos los colores: tintos, blancos, rosados…
En Rioja hemos demostrado que además de elaborar tintos maravillosos capaces de perdurar en el tiempo también producimos grandes vinos blancos que marcan la historia de Rioja. Recordemos que nuestro Corona 1939 fue el primer vino blanco que obtuvo los 100 puntos Parker.
P.- ¿Con cuál de ellos se queda o cuál destacaría? ¿Por qué?
Para nosotros todos nuestros vinos son especiales, pero he de reconocer que Imperial ocupa un lugar destacado en nuestros corazones. Se trata de nuestro buque insignia y de hecho fue elegido Mejor Vino del Mundo por la prestigiosa revista estadounidense Wine Spectator en el año 2013, convirtiéndose en el primer vino español en lograr este reconocimiento, y hasta la fecha único vino español. Se elabora de forma muy artesanal y sólo en aquellos años que consideramos que la calidad será la optima. Si no, no se elabora.
Imperial está presente en todas las cartas de los grandes restaurantes y se ha servido en grandes acontecimientos. Es un vino que gusta a todos, jóvenes, mayores, clásicos y modernos. Un vino fino y elegante.
En cualquier caso, el éxito de Imperial se debe también al propio éxito de nuestras otras marcas Cune y Viña Real. Son todos grandes vinos que elaboramos con gran esmero, sin olvidarnos nunca de sus raíces y su valor. Cada año es único y una vuelta a empezar.
P.- Lleva poco tiempo como enóloga jefa de las bodegas. ¿Qué supone para usted estar al mando de una bodega tan importante como Cvne? ¿Responsabilidad o reto?
R.- Comencé a trabajar en CVNE en 1990 bajo la supervisión de Basilio Izquierdo, un gran profesional del que aprendí a innovar y a estar preparada para errar sin caer en el desánimo o la frustración. Para mí es un orgullo y una responsabilidad estar ahora al frente de los vinos de esta centenaria bodega riojana que es referente a nivel mundial.
Son más de 137 años de respeto a la tradición vitivinícola, de esfuerzo, de innovación en los procesos de producción, de empeño por lograr la máxima calidad, de experimentación y de múltiples reconocimientos internacionales. Y ahora formo parte de ello, lo que convierte cada día en un reto para seguir llegando a lugares que hasta ahora no hemos explorado y para seguir descubriendo fórmulas escondidas. Hay pocas cosas tan vivas como el vino. Nunca deja de sorprendernos.
P.- ¿Qué valoración hace de su trabajo en este tiempo? ¿Qué está siendo lo más complicado?
R.- Desde que me incorporé a CVNE asumo el reto de adaptar los vinos de una bodega centenaria a los nuevos tiempos sin perder la esencia que le ha caracterizado a lo largo de su historia. Tratamos de combinar tradición e innovación para mantener su seña de identidad, pero los consumidores son cada vez más exigentes y son ellos los que nos marcan el camino para seguir obligándonos a superarnos cada día y a mimar nuestras cosechas en busca del mejor vino.
P.- En una bodega tan reconocida y prestigiosa como Cvne, ¿ya está todo hecho/dicho? ¿Queda lugar para la innovación? ¿Cuáles son sus retos futuros en la bodega?
R.- La filosofía de trabajo de CVNE ha sido, y sigue siendo, investigar nuevas posibilidades en la crianza del vino y buscar la modernización en los procesos de producción y elaboración de sus caldos. Siempre hemos sido pioneros en el sector. Fuimos los primeros de España en el uso de depósitos de hormigón, así como en el uso de gravedad durante la vinificación. Asimismo, con la bodega Viñedos de Contino fuimos pioneros en rescatar del olvido riojano la variedad de uva Graciano.
En CVNE contamos con las instalaciones tecnológicamente más vanguardistas y eso nos abre un amplio abanico de posibilidades. Creo que es buen momento para mejorar en el trabajo de una viticultura sostenible y desde esa perspectiva buscar las prácticas que nos ayuden a alcanzar la excelencia de los vinos. Investigar, investigar e investigar. Esa es nuestra constante.
P.- Usted siempre ha mostrado su pasión por el vino. ¿Ser enóloga es un chollo, que le permite combinar trabajo y pasión?
R.- Sin duda. Disfruto cada día de mi trabajo, dentro y fuera de la bodega. Cuando estoy en la bodega, creo en mi imaginación diferentes personajes, pienso qué vino le gusta a cada a uno de ellos y después trato de hacerlo realidad. Es un trabajo apasionante que requiere de constancia, pero el resultado compensa todo el esfuerzo realizado en el camino.
Y fuera de la bodega, reconozco que soy una gran amante de acompañar mis momentos tanto de celebración como de relax con una buena copa de vino. No es como llevarme el trabajo a casa, es más bien hacer de mi pasión un modo de vida.
P.- ¿Qué papel juega el enólogo y cuál la materia prima en la elaboración de un buen vino?
R.-La elaboración de un buen vino no es algo sencillo y no hay una fórmula matemática o secreta. En esta apasionante tarea juegan múltiples factores, desde contar con el apoyo de un buen equipo, hasta llevar a cabo una cuidada selección de la uva, pasando por un refinado tratamiento en bodega. Cada año tenemos además la variable de la climatología, que juega un papel importante en la calidad de la uva. Con todos estos factores podemos elaborar productos diferentes y eso es lo que me apasiona del mundo del vino.
P.- ¿Cómo se consigue ser la enóloga jefe de varias bodegas y no morir en el intento?
R.- La fórmula se sencilla: rodeándote de un gran equipo, y la suerte es que yo cuento con el mejor. El equipo de enología de CVNE es mayoritariamente femenino y joven, contando también con la figura de Jesús de Madrazo al frente de Contino. Se trata de un equipo entusiasta con lo que hacemos, lo que facilita mucho el trabajo y hace posible que cuando las cosas no salen como queremos, tengamos el ánimo suficiente para volver a intentarlo. Nos apoyamos mucho las unas a las otras.
P.- ¿Cómo está yendo/cómo ha ido la vendimia?
R.- Somos optimistas en calidad y cantidad, a pesar del calor de las últimas semanas. Habrá que seguir muy de cerca cómo se comporta la meteorología los próximos días.
Turismo y medio ambiente
P.- ¿Cómo está influyendo el cambio climático en la elaboración del vino? ¿Qué importancia le dan a las cuestiones medioambientales?
R.- En CVNE apostamos por un futuro sostenible y llevamos más de diez años tratando de ser una bodega respetuosa con el medio ambiente. Prueba de ello es que hemos sido la primera bodega en conseguir la doble huella ambiental en España, que sirve para determinar con exactitud la emisión de gases de efecto invernadero que la compañía emite a la atmósfera, así como el consumo de agua directa e indirecta que CVNE tiene como productor. De estos estudios se desprende que con la mitad de uso de agua que la media nacional, somos capaces de producir la uva necesaria para elaborar nuestros vinos. Se calcula que la viticultura llevada a cabo por la bodega supone en términos de ahorro un total de 1.000 litros de agua por cada litro de vino, respecto a otros vinos similares españoles.
Nuestro compromiso con el medio ambiente es firme y ya hemos reducido el peso de las botellas en casi un 20%, el cartón procede de material totalmente reciclado y los tapones que se utilizan son de corcho, una materia natural. Pero nuestros esfuerzos irán más lejos y de cara a los próximos años nos hemos marcado el reto de reducir el impacto medioambiental en un 10%. Seguro que lo logramos.
P.- ¿Qué importancia le dan al enoturismo?
R.- Apostamos por ofrecer un amplio abanico de experiencias en bodega donde aunar la cultura del vino, los valores de nuestra tierra, la gastronomía riojana y cómo no, la historia de cinco generaciones elaborando grandes vinos en rincones centenarios. Gracias a todos estos ingredientes recibimos a más de 25.000 visitantes que vienen a nuestra casa a conocernos y a disfrutar de experiencias sin igual, con sus empresas, sus grupos de amigos, en pareja, en familia o aprendiendo con los más peques de la casa.
Contamos con un servicio de ludoteca y un taller de creatividad especial para que los niños puedan decorar sus propias barricas o hacer manualidades con corchos de vino, mientras los mayores, por su parte, pueden visitar las bodegas o participar en catas tanto de vino como otras especiales de aceites, quesos o incluso chocolates. Existe también la posibilidad de disfrutar de Viña Real Experience, un mirador ubicado en lo alto del cerro en el que se encuentra la bodega Viña Real, rodeado de viñedos, que se ha convertido en el plan perfecto para huir del ruido de las ciudades y disfrutar de la naturaleza con un picnic o cata al aire libre.
Pero de lo que más orgullosos estamos en estos momentos es de habernos consolidado como espacio expositivo gracias a las exposiciones de artistas de renombre internacional como Eduardo Chillida, la escultora Cristina Iglesias o Anthony Caro con cuyas obras contamos en la bodega hasta el próximo mes de octubre. La escultura y el vino son dos artes que hablan el mismo idioma.
Se advierte al usuario del uso de cookies propias y de terceros de personalización y de análisis al navegar por esta página web para mejorar nuestros servicios y recopilar información estrictamente estadística de la navegación en nuestro sitio web.
0 comentarios en