22 febrero, 2019
Bodegas Ochoa nos desvela y profundiza sobre una de sus variedades más especiales, la variedad Moscatel de grano menudo que muestra una gran complejidad aromática.
Su nombre viene de su fisionomía, ya que el tamaño de la baya es muy pequeño y sus racimos son muy apretados.
Hay más de 300 variedades diferentes dentro de la Moscatel, entre los cuales está muscat blanc à petits grains, gelbermuskateller, brown muscat, moscatel morisco, muscat canelli y moscatel de Frontignan. En Macedonia y Serbia es conocida como temjanika.
Esta variedad lleva siglos implantada en Navarra y fue con la que empezaron el I+D en Bodegas Ochoa.
Corría el año 1994 y decidieron implantar técnicas innovadoras con ayuda del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial, CDTI, para controlar la variedad y elaborar así el Ochoa Moscatel Vendimia Tardía. Años más tarde, crearían con ella otra pequeña revolución en el mercado, el MdOMoscato de Ochoa.
“El secreto de nuestro Moscatel de Grano Menudo está en el campo. Suelos pobres con una inmejorable exposición al sol crean un microclima especial para la sobremadurez que buscamos”, asegura la bodega en su blog.
Apuntan que el clon también es un factor determinante, realizan una selección masal de antiguos viñedos de moscatel para conseguir la más auténtica caracterización del moscatel de grano menudo de Navarra.
Esta uva posee una gran complejidad aromática; frutas tropicales, piña y maracuyá, potente aroma amielado, de pasas de la variedad Moscatel de Grano Menudo. Rosas, flor de azahar. Perfecto para probar con quesos fuertes y platos salados para experimentar con tu paladar.
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