11 diciembre, 2017
J.A.L
Estando en una de las exhibiciones de Iván en un importante evento gastronómico, un espectador, que decía ser experto en lo que Talens es maestro, se dirigió a él para manifestar lo rápido que trabaja y la seguridad con que lo hacía. La forma de hablar del sujeto contenía más sorna que admiración y se llevó solo la sonrisa de Iván Talens. La prudencia de nuestro amigo evitó que se llevara algo más.
Creo que el mundo de la coctelería es muy complicado y requiere no solo de una serie de conocimientos específicos, sino también estar al tanto de unos cientos de ingredientes que van desde las distintas bebidas hasta los elementos que, combinados sabiamente, dan como resultado auténticas obras de arte que degustamos en recipientes al uso y acompañados de lo que merece cada una de estas creaciones.
No, no se trata de lanzar un vaso o una botella al aire ni de intentar hacer equilibrios con las burbujas que dejamos caer sobre una cuchara.
Hay mucho más, y he de reconocer, una vez más, mi admiración por Iván Talens, uno de nuestros mejores cocteleros y que se ha empeñado y va consiguiendo que este arte vuelva a estar de moda en los mejores locales de España, porque, además, nuestro Iván viaja por todo nuestro país y fuera de él, llevando y enseñando su arte a quien lo solicita.
Iván Talens se merece el reconocimiento a una vida dedicada a la pasión de la coctelería. Arte y gusto al que nos ha enganchado.
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