28 July, 2023
La nueva añada de CORIMBO elogia toda la elegancia de la uva tinta fina, con máximo respeto a la variedad, que es marca de la casa. Desde la bodega afirman que es, posiblemente, la mejor añada hasta el momento y, aseguran, será un año para la historia de esta bodega de la Ribera del Duero burgalesa.
Bodegas LA HORRA inició el mes de junio las obras de su nueva bodega diseñada por la arquitecta y Premio Nacional de Arquitectura Carme Pinós, bajo criterios de sostenibilidad e integrada en el paisaje. Las obras finalizarán en 2025 pero se estima que puedan vinificar en ella a partir de la añada de 2024.
Bodegas LA HORRA celebra con la nueva añada de CORIMBO una década elaborando tinta fina en la Ribera del Duero burgalesa. Será una añada para el recuerdo, no solo por cerrar esta primera década, sino por ser, posiblemente, la mejor añada de CORIMBO hasta el momento, tal y como afirma el equipo técnico de la bodega. CORIMBO 2019 es un fiel representante de su añada, con una cosecha marcada por su poca producción y extraordinaria calidad, ofreciendo un vino de tinta fina muy expresivo y de gran elegancia.
Desde aquel primer Corimbo, de la añada de 2009, con el que se estrenó la bodega, Bodegas LA HORRA se ha mantenido firme en su filosofía de crear un tinto de marcado estilo e indudable fidelidad a su terruño y cosecha. Así, conjuga el protagonismo y carácter de la fruta con una crianza respetuosa, que permita siempre expresarse libremente a la tinta fina.
Tras un 2018 que fue lluvioso, que aportó una especial frescura a la añada, en el 2019 se sufrió un verano seco, aunque las cuantiosas lluvias de primavera permitieron que el viñedo acumulara las reservas necesarias para poder sobrellevarlo. La vendimia llegó el 21 de septiembre y se alargó hasta el 16 de octubre, con unos resultados muy satisfactorios, destacando la sanidad de sus uvas, graduaciones alcohólicas moderadas y una buena producción.
Color: rojo cereza picota de capa alta y vivo ribete rojo.
Aroma: muy intenso, con notas de frutas, en la gama de la mora y la cereza, que se conjugan con los frescos aromas de plantas aromáticas bajo el pinar. La madera está impecablemente ensamblada, creando un conjunto muy complejo y delicado.
Boca: es voluminoso, elegante y con muchísima finura, formando un conjunto en el que las frutas que aparecían en nariz y las hierbas aromáticas, como la mejorana y la jara, conviven en armonía. Un tinto con un toque de golosura, por la calidez de la añada, que encuentra su contrapunto con notas balsámicas de menta y malvavisco. Muy agradable, con taninos finos y dulces de gran calidad que le dan vida.
Nueva bodega sostenible
La nueva bodega sostenible e integrada en el paisaje de Bodegas LA HORRA se identificará por una teja colosal de hormigón visto, dispuesta a modo de cubierta ajardinada, en paralelo a las curvas de nivel. Aunque la fecha estimada de finalización de la obra es abril de 2025, se espera poder vinificar la cosecha 2024 en las nuevas instalaciones.
“El proyecto pretende que la bodega y los viñedos formen un paisaje inseparable que se convierta en la insignia del vino que producen”, explica Pinós. En todo el proceso de diseño se ha tenido en cuenta la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono. La nueva bodega estará excavada a media ladera, de tal forma que se disolverá en el paisaje de la finca vitivinícola y se aprovecharán las ventajas geotérmicas que aporta estar semienterrada para su climatización, sin necesidad de combustibles fósiles. El sistema de ventilación será pasivo, sin máquinas ni motores y, en consecuencia, ecológico, sostenible, silencioso y carente de las vibraciones que afectan al correcto desarrollo del vino. La bodega contará con energía solar y se iluminará con lámparas LED de bajo consumo. En el interior se utilizará hormigón visto mediante encofrado con cañizo y carpintería y revestimientos con ‘viroc’ (panel de virutas de madera y cemento coloreado en masa), que darán mayor calidez al espacio.
La nueva bodega se construirá al borde de un pinar, en la parte norte de la finca y ocupará 4.700 m2, que se destinarán a la elaboración, la crianza en barrica y al botellero, así como a una zona de venta directa y oficinas. Las naves existentes servirán ahora como centro logístico.
Se advierte al usuario del uso de cookies propias y de terceros de personalización y de análisis al navegar por esta página web para mejorar nuestros servicios y recopilar información estrictamente estadística de la navegación en nuestro sitio web.
0 comentarios en