José Antonio López
Me queda hasta el lunes para aparcar mi coche en el carril bus, eso sí, en las zonas permitidas, pero ya me han dicho que el 15, la niña bonita como se llama en el argot de la ONCE, se acabó lo que se daba. Bueno, hombre, inicialmente no te van a multar pero sí te dirán que no se puede dejar el coche y que, cuando acabe el plazo establecido ¿…? ya te multarán.
Mientras tanto se va a “trabajar” en la ampliación de las líneas nocturnas, la frecuencia de paso de las mismas y a ver si se rebaja la “tarifa especial de unos seis euros “ que te van a pedir, por noche, en los aparcamientos concertados.
¡Qué tranquilidad ¡ Me quito un peso de encima que me llevaba agobiando desde hace años. ¡Cómo no me había dado cuenta de que mi coche molestaba si lo dejaba aparcado en la zona bus! Claro, los buses nocturnos tienen problemas de circulación y los taxis y lo que sea. Igual que lo tienen por la mañana cuando se colapsan las zonas de colegios al llegar la familia a dejar al estudiante en la misma puerta del centro.
Ah! Perdón que eso es otra cosa.
Lo siento, es que voy de aquí para allá porque no quepo de contento cuando notemos que la hostelería, los espectáculos y muchos comercios van a tener problemas graves a la hora de recibir a sus clientes.
Cómo les diría yo… Es como cuando nos empeñamos en establecer un circuito para manifestarnos y siempre es el centro de la ciudad y además los sábados, que es el día en que muchos comercios tienen las ventas de la semana.
No me malentiendan. No estoy criticando a las personas o entidades que ejercen su legítimo derecho a manifestarse. Ni tampoco me meto con que el conductor de autobús o taxi tenga el más mínimo problema para circular.
No van por ahí los temas. Lo que sí digo y mantengo es que hay medidas que, según mi opinión, molestan más que ayudan y que la cosas hay que consensuarlas y ver los pros y las contras y…que no hay que tocar lo que está bien, o simplemente demostrar que, con la medida, se va a estar mejor.
Ya corre la noticia de que se quiere peatonalizar más de una calle emblemática. Una vez prendida la mecha…Los comerciantes, los restaurantes y locales de ocio, están que tiemblan. Los usuarios buscan un coche plegable.
¿De verdad era necesario todo esto?
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