Agullent: un refugio de tranquilidad lleno de encanto

Texto: Ana Morla / Fotos: Comunitat Valenciana

Agullent es un pequeño pueblo valenciano de poco más de 2.000 habitantes, ubicado en la comarca de la Vall d’Albaida y a los pies de la Sierra de Agullent. Se encuentra en un entorno privilegiado que destaca por la singularidad de su naturaleza y que ofrece grandes posibilidades senderistas, tranquilidad e historia. Favorecido por un clima y un suelo ideales para el cultivo de la vid, Agullent se ha transformado en un pueblo de vino. Esta tradición ha moldeado su entorno, dando lugar a hermosos paisajes de viñedos que caracterizan la zona.

La Iglesia de San Bartomeu se alza como uno de los pilares turísticos de la ciudad de Valencia. Lo que comenzó durante los siglos XVII y XVIII como un templo renacentista, se transformó en un derroche de detalles y exuberancia, característico del barroco valenciano. Entre sus tesoros más destacados se encuentra el Altar de las Ánimas, una obra única que se atribuye a la escuela del célebre pintor valenciano Juan de Juanes. 

Desde el siglo XV hasta finales del XX, el Molino Harinero de Agullent fue un pilar fundamental para la comunidad. Impulsado por el agua de la Font Jordana, molía trigo y maíz, alimentando a generaciones de habitantes. Hoy en día, este edificio histórico ha sido transformado en un museo y alojamiento rural, conservando parte de la maquinaria original. Las huellas del pasado también se encuentran en «El Lazareto«, una pequeña edificación que servía como refugio para aislar a los enfermos de enfermedades contagiosas como la peste. 

El Parque de la Font Jordana es un lugar ideal para pasear, relajarse y disfrutar de la naturaleza con la realización de pequeñas excursiones. Su emblemática fuente de cinco caños, ha sido durante siglos un punto de encuentro para los habitantes del pueblo, mientras que el agua que brota fresca de las «Penyetes» ha sido utilizada para el consumo, el riego y el antiguo Molí Fariner.
La Font Maciana por su parte, es un oasis natural para conectar con la Sierra de Agullent. Dispone de mesas y rutas de senderismo y ciclismo para disfrutar del paisaje.

Además de la gran oferta histórica y natural con la que cuenta la localidad, uno de los recursos que más utiliza el municipio para atraer a nuevos turistas es su oferta gastronómica. Dispone de manjares en forma de embutidos caseros y vinos locales. Durante dos generaciones, desde 1955, la familia de Francisco Gandía se ha dedicado al mundo de la viña. Cultivando alrededor de 35 hectáreas en las fincas “El Galtero”, “El Catalí” i “La Vega”, las tres situadas en la Vall d’Albaida, todo consiguiendo vinos premiado como L’Acvlius, el Cvp, el Rosa Rosae y el Vall Blanca.

Una figura clave en la defensa del valenciano como idioma es Enric Valor. El narrador fue uno de los estandartes en el proceso de recuperación y normalización del lenguaje regional. La obra del valenciano está arraigada a Agullent, por lo que se ha convertido en una parada obligatoria para los amantes de la lengua.

Fiestas declaradas como Interés Turístico de la Comunidad Valenciana:

La Nit de les Foguetes y las Fiestas del Miracle acogen cada primer viernes de septiembre una de las romerías nocturnas más antiguas de las tierras valencianas. Los visitantes y el vecindario en peregrinaje hacen lucir farolillos y fallas en memoria del milagro de la peste que realizó San Vicente Ferrer, el patrón de la localidad. Además, es el eje central de las fiestas de los Moros y Cristianos que se celebran anualmente la semana después de Pascua.

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