Déjate seducir por el mundo del vino
Déjate seducir por el mundo del vino
23 diciembre, 2021
Pedro G. Mocholí
Hay que reconocer que la separación entre la familia Honrubia y los responsables de Komori, que en su momento pude tildar de atrevida, no tengo más remedio que aceptar que fue acertada, visto lo visto después de los acontecimientos sucedidos en Madrid entre Ricardo Sanz, chef ejecutivo del Grupo Kabuki y sus socios, donde las navajas han volado al más puro estilo samurai.
Aquella decisión fue acertada, y de ello nos alegramos, pues no podemos más que admitir que en cuestiones de experiencia, Rafa Honrubia es todo un visionario y acentuado hostelero.
Por eso no le tembló el pulso cuando aquella aventura zozobraba y tenía que poner rumbo a otro puerto.
Y al igual que en la primera ocasión, volvió a elegir un hotel de 5 estrellas para tan apasionado proyecto. Al frente, como no podía ser de otra manera, se ha mantenido Nacho Honrubia, como ya pasaba en el hotel Westin.
El espacio elegido ha sido el Valencia Palace en plena alameda valenciana, y muy próximo a los otros locales del grupo: Aragón 58 y La Principal, y el nombre elegido es Hōchō, nombre que se le da a un tipo de cuchillo japonés para elaborar los distintos cortes de pescado.
El grupo SH Hoteles lleva años apostando por la alta gastronomía, y el local elegido, no podía ser otro que su buque estrella; el Valencia Palace, el primer hotel que en Valencia fue 5 estrellas.
En la planta baja y con entrada propia, Hōchō nos ofrece una decoración muy cálida con colores claros, nada intensos y muy luminosos, a ello ayudan los grandes ventanales que rodean al comedor. El espacio gastronómico está abierto al público, y se ve perfectamente a los Sushiman elaborando in situ los platos en el mismo momento de la comanda.
La carta y las propuestas se nutren de muchas elaboraciones que ya encontrábamos en Komori, es normal que durante estos primeros meses, sean ellas la base. Estamos seguros que conforme vaya pasando el tiempo, las iremos viendo evolucionar.
Mantienen las recomendaciones fuera de carta, en ellas se puede disfrutar de pescados salvajes con cortes especiales.
De mi primera visita, acontecida este pasado lunes, guardo una gran recuerdo de la calidad de los productos, pescados, carnes y verduras utilizados, una norma en los establecimientos de la familia Honrubia.
Empecé con un clásico de la casa como es el ‘Bocata de calamares’, unas finas lonchas de calamar, cubiertas de migas de pan fritas. Como notas más jugosas, han incorporado una ligera lágrima de mayonesa.
Usuzukuri de ika (homenaje al bocata de calamares).
Una interminable lista de nigiris fue la continuación: de gamba de Dénia, de huevo frito con paté de trufa blanca, de hamburguesa, de anguila, de toro y de steak tartare (le faltaba toque picante).
Nigiris de anguila y steak tartare.
Jugosidad y sabores limpios, deliciosos, concretos y muy sabrosos.
No faltó la tempura mixta, verduras y langostinos, con un punto de fritura perfecto, con el aceite a la temperatura indicada.
Gyozas de carne de cerdo con un ligero toque especiado. Y para finalizar dos temaki, uno de atún con un ligero toque picante, y el otro de salmón.
De postre volví a demandar otro clásico de la casa, los buñuelos de calabaza con chocolate.
Aunque la bodega es amplia, rica y muy bien surtida, me decidí a tomar vino a copas, y hay que reconocer que la oferta es muy correcta. De blanco encontré un rico y aromático Pazo de Señorans, de cava un Recaredo y de tinto un Finca Resalso de la familia Emilio Moro, un vino criado en roble muy armonioso con ricos matices minerales y de fruta muy fresca.
Hay que reconocer lo acertado de la decisión, el cambio ha sido muy positivo, y la oferta de cocina japonesa sigue siendo muy solvente.
Hōchō. Paseo de la Alameda, 32. Tel.: 960 045 635. Valencia.
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