Oli Oli, una almazara ecológica en Requena que se alza entre viñedos

Mar Lafuente / Vídeo y foto: Vicent Escrivà y Fernando Murad
Inmersa en un espectacular paisaje de infinitos viñedos, rodeada de olivos y ante el Parque Natural de las Hoces del Cabriel, se alza la primera almazara con línea exclusivamente ecológica de la Comunitat Valenciana: Oli Oli. Allí, en una pequeña aldea de Requena, en San Antonio, donde las tierras guardan un enorme arraigo con el cultivo de la vid, crecen los olivares de Oli Oli ofreciendo auténticos tesoros en forma de “oro líquido” o más conocido como Aceite de Oliva Virgen Extra. 

Oli Oli nace de la ilusión de dos amigas, la de María Dolores Ferrando y Ane Barrutia. Siempre que María Dolores -Maloles para los amigos-, habla de Oli Oli no puede evitar contar cómo empezó todo: con la ilusión de ambas por poner en marcha un proyecto juntas. En un principio Ane siempre había dicho que cuando fueran “viejecitas” elaborarían vino, pero Maloles consiguió convencerla para cambiar la idea de las viñas por las del olivo. Y qué acierto… Quién les diría a ellas que en un futuro iban a conseguir poner en marcha este proyecto con el que han recibido tantos reconocimientos a la calidad y el sabor de sus AOVEs de alta gama. 

Ya con la decisión tomada, Maloles comenzó la búsqueda del lugar donde iban a nacer sus aceites. En un principio buscaron cerca de Valencia, en sitios típicos olivareros como es Segorbe o Enguera, pero no terminaban de encontrar algo que les convenciera. Aunque Requena es conocida por ser tierra de viñedos, la familia de Maloles es de allí y, como dice ella, “la cabra tira al monte” y empezaron a buscar por sus tierras. Se enamoraron del entorno y apostaron por él, ya que el olivo necesita sitios altos y muy bien ventilados, características que se reunían en el municipio. Así es como ve la luz Oli Oli, con el tesón, el trabajo, el esfuerzo y la iusión de dos amigas por elaborar aceite. 

Desde sus comienzos han tenido muy clara su filosofía que se resumen en lo que llaman las ‘5 eSes’: sociedad, sostenibilidad, saber, sabor y salud. Sociedad porque son conscientes de que forman parte de una sociedad vinculada a un territorio, por ello apuestan por proyectos que contribuyen a mantener y mejorar el bienestar de las personas que forman parte de la sociedad, como trabajar con personas con diversidad funcional con Campus Diversia, entre otros proyectos. La segunda es sostenibilidad, la palabra lo dice todo, Oli Oli apuesta por optimizar los recursos de agua, placas solares, por la biodiversidad, el cultivo ecológico… intentando ser lo más sostenible posible. Otra de sus eSes es el saber, desde Oli Oli imparten cursos y también ellos realizan muchos cursos para estar constantemente en formación continuada y reciclándose. La cuarta es el sabor, porque como dice Maloles, “todo esto si el aceite no está rico, no caminamos”. Y la quinta es la salud, “para nosotros es muy importante la salud del medio ambiente y también de las personas”, asegura la fundadora, por ello trabajan en cultivo ecológico e intentan hacer aceites con un contenido alto en fenoles, es decir, en antioxidantes. 

Bajo esta filosofía, con mucha ilusión, esfuerzo y trabajo ven la luz los Aceites de Oliva Virgen Extra de esta almazara requenense. Gonzalo Pin tiene mucho que ver con el resultado. Él es el maestro de almazara, lo que quiere decir que es el que elabora el aceite, lleva la parte técnica del campo y toma decisiones como el punto de temperaturas o el punto de recogida de la aceituna. “Soy el que maneja las máquinas dentro de la fábrica”, asegura. El mundo del aceite cambió el rumbo de vida de Gonzalo, le bastó con realizar una cata de aceites y un curso sobre agricultura ecológica para enamorarse de este mundo tan singular que es el del aceite. 

Actualmente elaboran dos gamas: ‘1 olivo por la paz’ y ‘Oli Oli’. Los aceites de ambas gamas son Virgen Extra ecológicos y monovarietales. La primera gama está compuesta por tres AOVEs, cada uno de una variedad, concretamente arbequina, picual y cornicabra. La segunda gama son AOVEs un poco más premium que también está compuesta por tres referencias, una de frantoio, otra de cornicabra y una última de arróniz. Aunque son gamas diferentes y aceites muy distintos entre sí, todos ellos reúnen unas cualidades que les hacen de alta calidad. 

Unos AOVEs únicos que quien los prueba se enamora y más aún si lo hace en la propia almazara, donde nace y se elabora. Porque eso es posible, en Oli Oli hacen una gran apuesta por el oleoturismo. Para Maloles, “es una forma divertida e interesante de conocer el mundo del aceite, conocer los procesos, de aprender a distinguir el virgen extra del virgen de otro tipo de aceite de oliva…”. 

Sus aceites o las experiencias para visitar la almazara se pueden consultar en su página web. Una experiencia única que no te puedes perder.

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