Bodegas Novos, un proyecto familiar que brota de viñas centenarias de bobal

Texto: Mar Lafuente / Vídeo y fotografía: Fernando Murad, Laura Lázaro y Pedro R. Arias
Requena guarda una enorme tradición vitivinícola. Generaciones de viticultores han estado trabajando estas tierras en las que hoy se dibuja un espectacular paisaje de viñedos. Será esto, la autóctona bobal o los maravillosos vinos que se están elaborando en la zona, lo que está haciendo que cada vez sean más los que regresan para recuperar esas viñas que con tanto cariño trabajaron sus antepasados. Y eso es lo que ha pasado con Bodegas Novos, un proyecto formado por una familia que se convierte en la cuarta generación de viticultores con una gran apreciación por la calidad, con ganas de trabajar, ilusión y con el afán de continuar y ensalzar el legado que han dejado sus abuelos y bisabuelos. 

Bodegas Novos es un proyecto joven que nace en 2019, pero que sienta sus bases en viñas centenarias de bobal situadas en la aldea de La Portera, en el municipio de Requena. Un proyecto que tiene muy claro su objetivo: mantener las viñas de entre 80 y 120 años que les dejaron sus antecesores y con ellos elaborar vinos de calidad que demuestran el gran potencial de la variedad reina de la zona, la bobal. En definitiva, un nuevo proyecto con una larga tradición detrás, la de la familia Ramos. 

Tras una larga temporada dedicándose a la hostelería, Germán Ramos, el alma de Bodegas Novos, decidió volver a sus raíces y apostar por poner en valor los viñedos que tanto había mimado su familia durante décadas. De una forma u otra, el vino siempre ha formado parte de su vida, de hecho fue uno de los fundadores de Torre Oria, donde el cava de Requena empezó a labrar su camino. Ahora ha decidido volver a sumergirse en el cultivo de la vid y elaborar vinos que den todas las cualidades que sus viñas pueden dar en base al espectacular entorno en el que se encuentran. 

“Supone un gran esfuerzo mantener este tipo de cultivos, la restauración de las viñas es muy costosa y muy ardua. Ahora estamos en ese proceso y la intención es poder seguir en ello siempre. Es un trabajo muy duro y muy complicado, pero creemos que si funciona nos va a dar muchas satisfacciones”, asegura Germán. Un esfuerzo que ya ha empezado a dar sus frutos que cogen forma de vino: Labor de Sol y Tinto de Luna, dos vinos de bobal con los que Novos se ha lanzado al mercado. Germán nos ha explicado que con estos dos vinos pretenden “conseguir que la bobal tenga una imagen distinta a otras épocas, que sea una variedad que se sitúe en lo más alto de los vinos”, un objetivo en el que está trabajando también Pepe Hidalgo como enólogo y quien Germán cree que les puede dar los mejores consejos.

Dos vinos de bobal, pero a la vez muy diferentes. Labor de Sol tiene un tiempo de crianza en barrica más corto, el primer año solamente unos cuatro meses, por lo que es un vino en el que se aprecia perfectamente la fruta y se dejan al descubierto todas las características que ofrece la bobal, vino totalmente “desnudo”, como ha explicado Germán. En cambio, Tinto de Luna es un vino que pasa muchos más meses en barrica, por lo que, aunque se sigue apreciando perfectamente la uva, hay más presencia de los tostados, del sabor de la madera y de la pequeña oxidación que se produce en este periodo más largo. 

En el mismo sentido, son vinos que siguen la misma línea estética, pero que a la vez son opuestos, como la luna y el sol. En ambos se ven reflejados a dos abuelos de la familia, el padre y el suegro de Germán. El primero carga con el sol, un homenaje a la faceta de agricultor de su padre, un hombre muy trabajador que “cargaba con todo el ímpetu del sol”. En cambio, el segundo disfruta de la luna haciendo referencia a que es un vino “más lúdico, más de relax, más de disfrutar de lo que se ha hecho a través del tiempo con los vinos”, en palabras de Germán.

Dos vinos monovarietales de bobal que saben a territorio y son el reflejo de la máxima expresión de la bobal. Actualmente tienen la bodega ubicada en Finca Ardal, una antigua propiedad donde anteriormente ya había tenido vida una bodega. Aquí es donde nacen estas dos referencias hasta que puedan poner en marcha su propia bodega. Además, ya han puesto en marcha las visitas enoturísticas, una oportunidad perfecta para conocer mucho más en profundidad este bonito y especial proyecto.

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