Déjate seducir por el mundo del vino
Déjate seducir por el mundo del vino
29 julio, 2022
Mar Lafuente
En estos meses de tanto calor, lo que más nos apetece es salir a las terrazas a tomar algo fresquito y brindar. Un momento del año en el que muchos elegimos llenar nuestras copas de refrescantes vinos blancos que nacen en nuestras tierras, las de la Comunitat Valenciana. Y es que la lista de blancos valencianos elaborados con variedades autóctonas es muy amplia, por eso hoy os proponemos dos vinos perfectos para este verano que elabora la Cooperativa Sant Pere de Moixent: Sant Pere Vinyes Velles Blanc 2019 y Sant Pere Blanc 2021.
Uvas de calidad y vinos de calidad, esos son los rasgos por los que destacan los vinos de la Cooperativa Sant Pere de Moixent. Con una larga trayectoria, esta nace oficialmente en 1951 con la vocación de unir a un gran número de agricultores para “organizar, defender y atender sus producciones agrícolas y con ello obtener las mejores oportunidades”, así describen desde la bodega lo que era y es su propósito y espíritu desde los comienzos.
En el interior de la provincia de Valencia, en el municipio de Moixent, se encuentra esta Cooperativa de tamaño medio en la que trabajan, sobre todo, variedades autóctonas. En sus cuidadas instalaciones y con una minuciosa elaboración artesanal que les ha ofrecido su larga experiencia, tratan las uvas de excepcional calidad con las que posteriormente dan forma a sus vinos, tanto tintos como blancos amparados por la Denominación de Origen Valencia.
Hoy nos vamos a centrar en dos de sus referencias, perfectas para llenar las copas este verano y brindar por los buenos momentos. Os presentamos Sant Pere Vinyes Velles Blanc 2019 y Sant Pere Blanc 2021, dos coupages muy diferentes entre sí, tanto por variedades como por la forma de elaboración.
Sant Pere Vinyes Velles Blanc 2019 es un coupage elaborado con tres variedades: 60% Pedro Ximénez, 30% Macabeo y 10% Malvasía. Nacen de una selección de parcelas de cepas viejas en vaso situadas a unos 550 metros de altitud. Para su vinificación realizan una vendimia manual, un posterior despalillado y una fermentación controlada con levaduras autóctonas en depósitos de hormigón. Para conseguir el resultado final, envejece ocho meses en los depósitos menos las uvas de Pedro Ximénez que fermentan y se crían en barricas de roble americano.
Color: dorado pajizo, con una densa lágrima que revela el intenso grado de fructosa y punto glicérico natural.
Aroma: predominan los aromas frutales con recuerdos a melocotón sobre suaves toques torrefactos de madera.
Boca: su paso por boca es agradable y la sutileza de su contenido alcohólico natural le aporta un final persistente, suave y elegante.
En cambio, Sant Pere Blanc 2021 es un vino blanco joven que está elaborado con un 90% de Macabeo y un 10% de Merseguera. Las uvas nacen de cepas viejas en vaso y formaciones jóvenes en espaldera que están situadas a unos 450-550 metros de altitud. Su elaboración comienza despalillando totalmente las uvas, una posterior maceración de seis horas y una fermentación con temperatura controlada con levaduras autóctonas en depósitos de hormigón. En cuanto a la crianza, pasa ocho meses en los depósitos de hormigón con las lías finas.
Color: amarillo pajizo, con una sensación ligera y fresca en copa.
Aroma: en nariz predominan aromas frutales frescos con recuerdos a flores y hierbas como el hinojo y frutas blancas.
Boca: fresco y ligero, con un final limpio y refrescante.
Un vino elegante que se convierte en la perfecta compañía para las comidas ligeras e informales.
En definitiva, son dos vinos diferentes, pero ambos perfectos para pasar un buen rato en compañía y brindar este verano.
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