L’Estibador: un enorme buque gastronómico

Hoy vamos a empezar este post por la parte por la que normalmente acabamos los artículos de gastronomía. Estamos en L’Estibador, una espectacular arrocería, aunque no sólo eso como verán en este artículo, en un enclave privilegiado, a escasos metros del mar, en plena playa de El Saler.

Llegamos temprano. Hemos quedado con Nuria Sanz. Dirige el negocio en el que entró su familia hace unos años. Es puntual, aunque en pocos minutos comprobamos que también es meticulosa y rigurosa con su trabajo. «Es la única manera de sacar adelante un negocio así».

Decimos que empezamos por el final porque lo que nos llama poderosamente la atención son los vinos que van entrando en procesión en el restaurante. Firmas como Mustiguillo, Habla, Azpilicueta, Enrique Mendoza, Gutiérrez de la Vega, Nodus hacen ‘cola’ en una espectacular bodega… De paso nos invitan a que nuestra primera curiosidad sea pedir la carta de vinos. Sencillamente un espectáculo. El winelover que visite L’Estibador tiene dónde elegir.  Da igual la materia que se busque: blancos, cavas, rosados, tintos, dulces o champagne. En todos los frentes hay batalla. Y los precios, en un vistazo rápido, están en mercado. 55 euros es el tope de la carta.

Al tiempo que curioseamos los vinos, de reojo podemos atestiguar cómo el mar forma parte de la decoración de L’Estibador. Un ambiente relajado, amplio y precioso, con el agua refrescando las paredes. Pero el cuadro más bello del local es la pared, curiosamente inexistente, del fondo conforme uno avanza el comedor. Es el que dibujan las dunas, la fina arena y las olas del mar. Ahí, a 20 metros. Un lujo ante el que se rendiría cualquier turista de cualquier rincón del mundo.

El paréntesis ha hecho que en cocina arranquen sin nosotros. Pascal Leydet y Óscar Ollero (asesor y jefe de cocina) ya han prendido los fogones. El primero con dos entrantes espectaculares. El segundo con un arroz sublime. Los tres platos reúnen tradición, atrevimiento, producto y mucho sabor. Arranca Pascal con un Foie fresco a la plancha con compota especiada de manzana, pan de frutos secos, flor de sal y pimientas molidas. Un toque francés no podía faltar. Le seguirá Pulpo a la brasa, papas arrugadas, ajo negro, crema de piquillo y cenizas de berenjena. Sublime. Nosotros paramos aquí, pero el visitante puede elegir entre un buen despliegue de mariscos, o lo que ellos llaman «Los Clásicos». Aquí no faltan el calamar de playa a la plancha, tellinas, clòtxinas o el all i pebre de anguila de l’Albufera.

De l’Albufera venimos y a l’Albufera vamos. Empezamos con los arroces. Una decena componen la oferta de secos y otros tantos los melosos. Enumerarlos todos sería muy largo. Vamos con los más especiales. Entre los secos destacamos el Arroz seco de pato confitado, setas y foie fresco y el Arroz de rodaballo, ajos tiernos y gambas. Aunque no se preocupen, están los clásicos de siempre, incluso de langosta y bogavante. Entre los melosos, citaremos el Meloso de la abuela (pollo y conejo) y el Meloso de l’Albufera (pato, anguila y caracol).

Pero todavía no les hemos dicho el que probamos porque lo guardamos para el final. Un arroz cremoso (un punto menos que el meloso) de gamba roja de Dénia con aguacate. Es un lujazo de técnica. Elaborado por Óscar Ollero al modo de los risotos, pero utilizando en la ligazón aguacate en lugar de nata. Espectacular y más que recomendable.

Así ha sido nuestra visita a L’Estibador, un enorme barco gastronómico varado voluntariamente en la arena de la Dehesa de El Saler. Con una oferta gastronómica notable, para disfrutarla oliendo, oyendo y sintiendo el mar Mediterráneo. Pueden encontrar L’Estibador en:

Paseo de la Dehesa N°3

Módulo del Barco de Estibadores
46012 El Saler, Valencia

Telefono: 961 830 540
Movil: 687 707 525 / 667 970 680
Email: info@lestibador.es

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