Tierra Bobal, un destino… Chera

En un entorno natural en el que las montañas se alzan, se encuentra Chera, una localidad del interior valenciano que ha construido una identidad en torno a los parajes naturales que le rodean y asentándose en el sector vinícola.

Este territorio, marcado por su singular orografía, es uno de los puntos que diferencian a Chera. Con un marco en el que la corteza terrestre se muestra en diferentes formas –pliegues, fallas y fracturas–, la localidad ha conectado con los valores naturales y se ha mimetizado con ellos para conseguir un respeto mutuo entre ambos.

El principal punto de interés es el Parque Natural de Chera-Sot de Chera, un paraje en el que el relieve es irregular y abrupto, y que debido a su gran diversidad de especies –tanto de fauna como de flora–, se ha convertido en uno de los mayores preservadores paisajísticos y medioambientales, pudiendo reconocerse cuevas, fuentes, cascadas o barrancos, de los que podrán disfrutar los amantes de la naturaleza, gracias a los diversos senderos y rutas que recorren esta zona.

Su vinculación con la naturaleza se hace más evidente cuando se visita el entorno de la localidad, ya que cuenta con el Parque Geológico de Chera, un excepcional espacio que destaca por ser el único de este tipo en la Comunitat Valenciana y el tercero en el territorio nacional, pero siendo el más importante de todos ellos. Su relevancia se debe a que es el que más piezas reúne, contando con un museo donde se exponen colecciones de fósiles, rocas y minerales, así como láminas y fotografías de las diversas estructuras tectónicas del entorno.

A nivel geológico, el principal reclamo es la Fosa de Chera, un hundimiento originado hace 65 millones de años y que cuenta con más de 1.000 metros de profundidad y 60 kilómetros cuadrados de superficie. Además, este parque es una visita obligatoria para paleontólogos y amantes de los dinosaurios, ya que dentro de este espacio se han localizado tres yacimientos de estos seres prehistóricos con una edad aproximada de 80 millones de años.

En su parte monumental, en la localidad valenciana destaca el Castillo de Chera, una construcción defensiva que data del siglo XII y construida por los almorávides siguiendo el estilo hispanomusulman durante la ocupación de estos pueblos en la península ibérica. A pesar de los diferentes daños que ha soportado –por el paso del tiempo y ataques–, la estructura se puede identificar gracias a los trabajos de recuperación realizados.

Uno de los edificios con mayor significación en la localidad por su antigüedad es la conocida como Casa del Conde, una vivienda levantada entre finales del siglos XVI y principios del XVII. A nivel arquitectónico y religioso destacan la ermita, realizada en 1681 siguiendo las instrucciones de Vicente Jordá y erigida en honor a la virgen de los Ángeles, y por otra parte, la iglesia, igualmente dedicada a la virgen de los Ángeles y construida a principios del siglo XIX.

Los amantes de la astronomía también tienen su espacio en la localidad cherana, pues se encuentra dentro del espacio “Destino Starlight”. El municipio cuenta con un lugar de visualización del cielo ubicado en el conocido «Mirador del Tío Juanete», un amplio cerro que domina todo el valle del Buseo, con unas increíbles vistas del paisaje montañoso y un espacio privilegiado para disfrutar de la astronomía.

Otro de los imprescindibles para los visitantes es su gastronomía, dominada por el vino y el aceite, además de platos típicos como la olla cherana, el ajo arriero, las migas ruleras, las patatas a montón con huevos, el cerdo y sus derivados.

En definitiva, Chera es el resultado de una suma entre naturaleza, historia y una gastronomía en la que el vino y el aceite se hacen protagonistas, siendo uno de los grandes atractivos para los turistas que llegan a la comarca de Utiel-Requena.

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